¿Cómo puedo proteger a mi hijo de una agresión sexual?

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El abuso sexual puede ocurrir a niños de cualquier raza, grupo socioeconómico, religión o cultura. No hay una manera infalible de proteger a los niños del abuso sexual, pero hay medidas que puede tomar para reducir este riesgo. Si le ocurre algo a su hijo, recuerde que la culpa es del agresor, no de usted y especialmente del niño. A continuación encontrará algunas precauciones que puede tomar para ayudar a proteger a los niños en su vida.

Si su hijo está en peligro inmediato, no dude en llamar al 911. Si no está seguro de la situación pero sospecha que el niño está siendo dañado, puede tomar medidas para calibrar la situación y poner fin al abuso.

Involúcrese en la vida del niño.

Involucrarse activamente en la vida de un niño puede hacer que las señales de advertencia de abuso sexual infantil sean más obvias y ayudar al niño a sentirse más cómodo acudiendo a usted si algo no está bien. Si ve o escucha algo que le preocupa, puede tomar medidas para proteger a su hijo.

  • Muestre interés por su vida cotidiana. Pregúntales qué han hecho durante el día y con quién lo han hecho. ¿Con quién se sentaron a la hora de comer? ¿A qué juegos jugaban después de la escuela? ¿Se lo han pasado bien?
  • Conozca a las personas que forman parte de la vida de su hijo. Sepa con quién pasa el tiempo su hijo, incluidos otros niños y adultos. Pregunte a su hijo sobre los niños con los que va al colegio, los padres de sus amigos y otras personas con las que pueda encontrarse, como compañeros de equipo o entrenadores. Hable abiertamente de estas personas y haga preguntas para que su hijo se sienta cómodo haciendo lo mismo.
  • Elija cuidadosamente a los cuidadores. Ya sea una niñera, una nueva escuela o una actividad extraescolar, sea diligente a la hora de seleccionar a los cuidadores de su hijo.
  • Hable sobre los medios de comunicación. Los incidentes de violencia sexual aparecen con frecuencia en las noticias y en los programas de televisión. Haga preguntas a su hijo sobre esta cobertura para iniciar una conversación. Preguntas como: «¿Has oído hablar de esto antes?» o «¿Qué harías si estuvieras en esta situación?» pueden indicar a tu hijo que estos son temas importantes de los que puede hablar contigo. Obtenga más información sobre cómo hablar con sus hijos sobre la agresión sexual.
  • Conozca las señales de advertencia. Familiarícese con las señales de advertencia del abuso sexual infantil y observe cualquier cambio en su hijo, por pequeño que sea. Ya sea que le esté sucediendo a su hijo o a un niño que usted conoce, usted tiene el potencial de hacer una gran diferencia en la vida de esa persona al intervenir.

Anime a los niños a hablar.

Cuando alguien sabe que su voz será escuchada y tomada en serio, le da el valor de hablar cuando algo no está bien. Puedes empezar a tener estas conversaciones con tus hijos en cuanto empiecen a usar palabras para hablar de sentimientos o emociones. No se preocupe si no ha empezado a hablar de estos temas con su hijo, nunca es demasiado tarde.

  • Enseñe a su hijo los límites. Haga saber a su hijo que nadie tiene derecho a tocarle o hacerle sentir incómodo, lo que incluye los abrazos de los abuelos o incluso las cosquillas de mamá o papá. Es importante que tu hijo sepa que su cuerpo es suyo. Igualmente importante es recordar a tu hijo que no tiene derecho a tocar a otra persona si ésta no quiere ser tocada.
  • Enseña a tu hijo a hablar de su cuerpo. Desde una edad temprana, enseñe a su hijo los nombres de las partes de su cuerpo. Enseñar a un niño estas palabras le da la capacidad de acudir a usted cuando algo va mal. Obtenga más información sobre cómo hablar con los niños sobre la agresión sexual.
  • Esté disponible. Reserve un tiempo para pasar con su hijo en el que tenga toda su atención. Haga saber a su hijo que puede acudir a usted si tiene preguntas o si alguien le habla de una manera que le hace sentir incómodo. Si acuden a usted con preguntas o preocupaciones, cumpla su palabra y dedique tiempo a hablar.
  • Hágales saber que no se meterán en problemas. Muchos agresores utilizan el secreto o las amenazas como forma de mantener a los niños callados sobre el abuso. Recuerde a su hijo con frecuencia que no se meterá en problemas por hablar con usted, independientemente de lo que tenga que decir. Cuando acudan a usted, cumpla esta promesa y evite castigarlos por hablar.
  • Déles la oportunidad de plantear nuevos temas. A veces, hacer preguntas directas como «¿Te has divertido?» o «¿Te lo has pasado bien?» no te dará las respuestas que necesitas. Dé a su hijo la oportunidad de plantear sus propias preocupaciones o ideas haciendo preguntas abiertas como «¿Hay algo más de lo que querías hablar?»

Para hablar con alguien capacitado para ayudar, llame a la Línea Nacional de Asalto Sexual al 800.656.HOPE (4673) o chatee en línea en online.rainn.org.

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