«San Simeón Estilita» está relacionado con otras obras posteriores a Hallam, como el Ulises, ya que recoge los sentimientos de Tennyson tras la muerte de su amigo. Más tarde, en In Memoriam, Tennyson describiría sus sentimientos de forma amplia. La obra tiene tintes irónicos que la hacen aparecer como una obra satírica. En su conjunto, la obra parodia el cristianismo que hace hincapié en el yo egoísta, a la vez que sirve de lamento del yo. El personaje de San Simeón es retratado de forma cómica y repugnante a la vez que simpática. También es simultáneamente un individuo anormal y un individuo normal que capta los extremos de la personalidad humana a la vez que exhibe características moderadas. Al final del poema, San Simeón pide que el lector siga su ejemplo. Su ejemplo es uno que el lector rechazaría, pero también es uno que el lector reconocería como el patrón básico de la humanidad.
Tennyson discute la conciencia y la personalidad en «San Simeón Estilita». El humor dentro del poema no es un enfoque principal de manera similar al Monólogo Lírico de Will Waterproof. Aunque el poema es muy diferente de las obras anteriores a 1842, tiene cierta relación con Las dos voces. El humor y la ironía son el resultado de que San Simeón trata de lidiar con su yo interno lidiando con su yo externo. Aunque odia su cuerpo, éste se convierte en su representación para ser espiritualmente correcto. San Simeón se centra en el mundo material, e incluso los cantos religiosos son importantes sólo por su sonido y no por su verdad. Incluso al pensar en su muerte, sólo puede pensar en cómo será tratado su cuerpo. Esto está rodeado por el poema que describe la condición física de San Simeón de una manera humorística, como su falta de dientes o que es un anciano, en lugar de ser descrito como un santo.
En relación con el estilo de «San Simeón Estilita» con el resto de las obras de Tennyson, James Kincaid declarar: «Los críticos suelen expresar su asombro por el hecho de que la misma mente pudiera producir tanto «St. Simeon Stylites» como «The May Queen»». Como monólogo dramático, el poema es similar a Los comedores de Lotos, Rizpah y Ulises, y se asemeja a los monólogos dramáticos de Robert Browning. En cuanto al uso de la ironía en el poema, se asemeja a los poemas de «Northern Farmer». En el uso de una figura que sirve de auditor del poema, «San Simeón Estilita» es similar a «Colón», «Desesperación», «Tiresias», Ulises y otros poemas. En el uso particular en «San Simeón Estilita», el auditor está en su lugar para determinar a quién dirige Simeón su conversación: Dios o San Simeón.