Durante este tiempo, comer sano, hacer ejercicio con regularidad y descansar siguen encabezando la lista para manteneros sanos a ti y a tu bebé. Y no pasa nada por estar cansada o sentirse agotada: la mayoría de las mujeres están más cansadas de lo normal durante el embarazo.
Tu cuerpo se esfuerza por producir hormonas y más sangre para mantener el cuerpo de tu bebé en desarrollo. Y el alto nivel de progesterona de su cuerpo influye directamente en su nivel de sueño.
Aquí tiene algunos consejos para combatir la fatiga:
Consuma una dieta equilibrada. Es importante, ahora y siempre, mantener la ingesta de hierro y proteínas. Si necesita picar algo, hágalo con alimentos saludables y ricos en nutrientes, no con alimentos vacíos de calorías.
Recuerde el agua. Diez vasos de 8 onzas al día (la deshidratación le hará ir más despacio).
Recuerde descansar. Parece sencillo, pero puede tener la tentación de hacer más, y no menos, durante esta época tan emocionante. Haga siestas. Su cuerpo necesita dormir, así que asegúrese de incluir las siestas en su rutina habitual.
Evite los compromisos adicionales. Parece fácil. No lo es. Póngase a sí misma, a su salud y a su bebé en primer lugar. No se comprometa en exceso.
Manténgase activa. Da paseos enérgicos. Puede ser difícil motivarse para moverse, pero recuerde que el ejercicio físico regular le hará sentirse con más energía.
Pida ayuda cuando la necesite, ya sea en la casa, en el trabajo o durante sus otras actividades.
Si sigue cansada, dígaselo a su médico. Puede que sea necesario comprobar sus niveles de hierro.