¿Qué es la radiación?
La radiación es energía que viaja en forma de ondas o partículas de alta velocidad. Puede ocurrir naturalmente o ser creada por el hombre. Existen dos tipos:
- Radiación no ionizante: Incluye ondas de radio, teléfonos celulares, microondas, radiación infrarroja y luz visible
- Radiación ionizante: Incluye radiación ultravioleta, radón, rayos X y rayos gamma
¿Cuáles son las fuentes de la exposición a la radiación?
La radiación natural nos rodea todo el tiempo. La mayoría proviene naturalmente de los minerales. Estos se encuentran en la tierra, suelo, agua o incluso nuestros cuerpos. Esta radiactividad natural también proviene del espacio exterior y el sol. Otras fuentes son creadas por el hombre, como los rayos X, la radioterapia para tratar el cáncer o las líneas eléctricas.
¿Qué efectos en la salud tiene la exposición a la radiación?
La radiación ha estado a nuestro alrededor a lo largo de nuestra evolución. Por ello, nuestros cuerpos se han adaptado para lidiar con los niveles bajos a los que estamos expuestos todos los días. Pero demasiada radiación puede dañar los tejidos al cambiar la estructura celular y dañar el ADN. Esto puede causar serios problemas de salud, incluyendo el cáncer.
La cantidad de daño que cause la exposición a la radiación depende de varios factores, incluyendo:
- El tipo de radiación
- La dosis (cantidad) de radiación
- Cómo estuvo usted expuesto, como a través del contacto de la piel, tragarla o respirarla, o a través de rayos que pasaron por su cuerpo
- Dónde se concentró la radiación en su cuerpo y cuánto tiempo estuvo expuesto
- Qué tan sensible es su cuerpo a la radiación. Un feto es el más vulnerable a los efectos de la radiación. Los bebés, niños, las personas mayores, mujeres embarazadas y problemas con problemas del sistema inmunitario son más vulnerables que los adultos sanos
Estar expuesto a una gran cantidad de radiación durante un corto período de tiempo, como durante una emergencias causadas por la radiación, puede causar quemaduras en la piel. También puede conducir al síndrome de radiación aguda o «enfermedad por radiación». Los síntomas incluyen dolor de cabeza y diarrea. Por lo general, comienzan dentro de unas horas. Esos síntomas desaparecerán y la persona parecerá saludable por un tiempo. Pero luego se enfermará de nuevo. La rapidez con la que se vuelven a enfermar, sus síntomas y la intensidad de la enfermedad depende de la cantidad de radiación a la que estuvieron expuestos. En algunos casos, este síndrome causa la muerte en los siguientes días o semanas.
La exposición a niveles bajos de radiación en el ambiente no causa efectos inmediatos en la salud, pero puede aumentar levemente su riesgo general de cáncer.
¿Cuáles son los tratamientos para la enfermedad por radiación aguda?
Antes de que comenzar el tratamiento, los profesionales de la salud deben saber cuánta radiación absorbió su cuerpo. Le preguntarán sobre sus síntomas, le realizarán análisis de sangre y pueden usar un dispositivo para medir la radiación. También obtendrán más información sobre la exposición, como el tipo de radiación, qué tan lejos estaba de la fuente y cuánto tiempo estuvo expuesto.
El tratamiento se enfoca en reducir y tratar infecciones, prevenir la deshidratación y tratar lesiones y quemaduras. Algunas personas pueden necesitar tratamientos que ayuden a recuperar la función de la médula ósea. Si estuvo expuesto a ciertos tipos de radiación, su proveedor puede darle un tratamiento que limite o elimine la contaminación de su cuerpo. También puede recibir tratamientos para sus síntomas.
¿Cómo se puede prevenir la exposición a la radiación?
Existen cosas que puede tomar para prevenir o reducir la exposición a la radiación:
- Si su proveedor de atención médica recomienda una prueba que usa radiación, pregunte sobre sus riesgos y beneficios. En algunos casos, es posible que pueda realizarse una prueba diferente que no usa radiación. Pero si necesita una prueba que use radiación, investigue un poco sobre las instalaciones de pruebas de imágenes donde usted vive. Encuentre uno que monitoree y use técnicas para reducir las dosis que entregan a los pacientes
- Reduzca la exposición a la radiación electromagnética de su teléfono celular. En la actualidad, la evidencia científica no ha encontrado un vínculo entre el uso de teléfonos celulares y problemas de salud en los seres humanos. Se necesita más investigación para estar seguro. Pero si aún tiene inquietudes, puede reducir la cantidad de tiempo que usa su teléfono. También puede usar el modo de altavoz (speaker) o un manos libres para colocar más distancia entre usted y su celular
- Si vive en una casa, mida los niveles de gas radón y, si es necesario, obtenga un sistema de reducción de radón
- Durante una emergencia de radiación, entre en un edificio para refugiarse. Manténgase bajo techo con todas las ventanas y puertas cerradas. Esté atento y siga las instrucciones de los servicios y funcionarios de emergencia