Hace tres décadas que el cine colombiano despertó, yendo más allá de los tópicos ligados a su crónica judicial-criminal-política –en realidad todos esos conceptos son sinónimos—, abriendo un vano a las vivencias de su pueblo, a historias e identidades invisibilizadas. Un filme como Monos, dirigido por Alejandro Landes –ganador en Sundance— es un perfecto ejemplo de ello. Un retrato generacional escondido en lo que parece otra descripción más de la otra realidad contemporánea del país sudamericano. Una sensibilidad que brota entre los huecos que deja la sangre y la metralla. Mientras la televisión se empeña en descubrir el carisma de los villanos de la historia reciente del país, el cine, a través de sus jóvenes autores, se centra en personajes que no aparecerán en los anales y cuyo camino termina con el último fundido a negro. El nuevo cine colombiano va a adquiriendo cada vez más peso en el panorama internacional. Surgen nuevas voces para hablar de aquellos que se liberaron del yugo de la violencia o al menos lo intentaron. A continuación, y siguiendo con nuestro ciclo «Panorama Iberoamérica», les presentamos cinco cintas clave dentro del audiovisual de Colombia.
La mansión de Araucaima (Carlos Mayolo, 1986)
Joya del surrealismo que parece bañada por el imaginario de Raoul Ruiz. La dirigió Carlos Mayolo (1945-2007), uno de los primeros iconos de las artes cinematográficas del país sudamericano. El filme nos acerca a las vivencias en un caserón de seis personajes: el guardián, el dueño, el piloto, el sirviente, la Machiche y el fraile. Su cotidianidad se alterará con la llegada de una joven y hermosa actriz que cambiará las rutinas de la casa. Está protagonizada por Adriana Herrán, José Lewgoy, Vicky Hernández y el propio Mayolo.
La estrategia del caracol (Sergio Cabrera, 1993)
Frank Ramírez, Fausto Cabrera, Florina Lemaitre y Humberto Dorado protagonizan esta comedia dramática realizada por Sergio Cabrera. Esta película ganadora de la Espiga de Oro de la Seminci narra la lucha de un grupo de vecinos por evitar el desahucio y el derrumbe del inmueble donde habitan, regentado por un millonario sin escrúpulos de Bogotá. El filme narra cómo la especulación se impuso en los 80 en las principales ciudades colombianas.
La vendedora de rosas (Víctor Gaviria, 1998)
La cinta de Víctor Gaviria, que luchó por la Palma de Oro del Festival de Cannes, está ahora de nuevo de actualidad gracias a un serial homónimo de Teleset y Sony Pictures. Crudo drama social con ecos neorrealistas que adapta la prosa de Hans Christian Andersen. Estamos en la periferia del Medellín de los 90, allí los niños sobreviven como pueden cada día. Muchos de los actores que formaron parte del filme, todos amateurs, fallecieron en fechas posteriores; incluso la actriz principal, está encarcelada por asesinato. La obra de Gaviria, por tanto, más que ficción es un espejo para una generación perdida.
María llena de eres de gracia (Joshua Marston, 2004)
Esta coproducción entre Colombia y Estados Unidos fue una de las mejores películas de 2004: premio del público en Sundance, Oso de Plata a la mejor actriz en la Berlinale y, sobre todo, la sorprendente nominación al Oscar para su protagonista, Catalina Moreno Sandino. Un filme con varias subcapas narrativas que narran los diferentes viajes, físicos y emocionales a los que se enfrentará una joven que, en un viaje a Bogotá, ya embarazada, inicia un nuevo viaje que conecta a Colombia con Estados Unidos; con la principal exportación ilegal del país sudamericano a Occidente como leitmotiv. Una cinta fantástica, dotada de excelentes momentos.
El abrazo de la serpiente (Ciro Guerra, 2015)
Pese a esta excepcional película, y la posterior Pájaros de verano (2018) –desigual pero igualmente interesante—, Ciro Guerra va a pasar a la historia por la crónica criminal-judicial más que por su labor como director. Con su tercera película logró el máximo galardón de la Quincena de Realizadores y la nominación al Oscar en la categoría foránea. El abrazo de la serpiente es una mirada antropológica a los rincones habitados del Amazonas. Un retrato del mundo indígena que articula una narrativa sobresaliente. Una obra mayor.
El antepenúltimo mohicano
Park City, Utah.
Más info: Estreno del drama psicológico Sospecha el 12 de noviembre en SundanceTV