Intervenciones para prevenir o tratar la resaca del alcohol: Revisión sistemática de ensayos controlados aleatorios
Pittler MH, Verster JC, Ernst E
BMJ. 2005;331:1515-1518
La mayoría de los adultos se familiarizan con los síntomas de la veisalgia (el término médico para la resaca del alcohol) en algún momento, pero muchos no se dan cuenta de las consecuencias mayores de esta enfermedad tan conocida. En un estudio realizado con 48 adultos sanos a los que se les asignó aleatoriamente recibir etanol 1,4 g/kg o placebo durante una sesión nocturna, el grupo que recibió alcohol demostró peores resultados en el recuerdo retardado de los acontecimientos de la noche anterior. Sin embargo, las medidas de recuerdo inmediato y de vigilancia general fueron similares a la mañana siguiente a la ingesta de alcohol, lo que indica que el déficit en el recuerdo retardado asociado al consumo de alcohol no se debió únicamente a la sedación.
El consumo excesivo de alcohol tiene importantes consecuencias sociales y de mortalidad. Los autores del estudio señalan que el coste de los salarios perdidos por el consumo de alcohol en Gran Bretaña asciende a unos 2.000 millones de libras al año. Además, en un estudio sobre la venta de alcohol y la mortalidad en Finlandia entre 1983 y 1999, los autores del estudio descubrieron que las intoxicaciones etílicas mortales se agrupaban en torno a los días festivos importantes, y que un aumento del 1% en la venta de bebidas alcohólicas se asociaba a un incremento del 0,4% en el número de intoxicaciones etílicas mortales.
Dadas las consecuencias del consumo excesivo de alcohol, el público en general tiene un gran interés en una cura para la resaca común. Esta revisión destaca que, aunque se ofrecen muchos tratamientos para la resaca, muy pocos se han probado en ensayos aleatorios. Cabe destacar la investigación centrada en el ácido tolfenámico, en la que una prueba de 30 voluntarios sanos tratados con 200 mg de ácido tolfenámico o placebo antes y después de beber demostró un beneficio del tratamiento activo en la reducción del dolor de cabeza, las náuseas, los vómitos, la irritación, el temblor, la sed y la sequedad de boca en comparación con el placebo. El ácido tolfenámico también se asoció a una reducción de los niveles de prostaglandinas séricas en comparación con el placebo. En otro ensayo de levadura seca frente a placebo en el que participaron 61 voluntarios, el tratamiento con 750 mg de levadura seca fue superior al placebo en cuanto a malestar, inquietud e impaciencia en la mañana siguiente a la toma. Por último, los autores del estudio encontraron un ensayo con ácido gamma-linoleico derivado de Borago officinalis que mejoró la puntuación global de los síntomas de la resaca en comparación con el placebo entre 40 individuos. En este último ensayo, sólo 18 sujetos completaron el estudio.
El año pasado se publicó otra investigación sobre una posible cura para la resaca del alcohol. En este estudio, los investigadores compararon la Opuntia ficus-indica (OFI) con un placebo para la prevención de la resaca. Aunque la OFI redujo la puntuación global de los síntomas de la resaca en un 18% en comparación con el placebo, este resultado no alcanzó la significación estadística. Al mismo tiempo, los sujetos que recibieron OFI tuvieron una mejora significativa de las náuseas, la anorexia y la sequedad de boca en comparación con el placebo. Los OFI también fueron eficaces en la reducción de los niveles de proteína C reactiva a la mañana siguiente a la ingesta de alcohol.
A pesar de estos datos de cierta eficacia para diversos tratamientos de la resaca, los autores del estudio concluyeron que no existen pruebas sólidas para la cura de la resaca común. Varios factores les ayudaron a llegar a esta conclusión, el mayor de los cuales es la falta de investigaciones de seguimiento de estos pequeños estudios que demostraron un beneficio sintomático. Los estudios citados anteriormente contaron con 30, 61, 40 y 64 voluntarios, respectivamente. Muchos de estos ensayos podrían servir como estudios piloto para ensayos más amplios en los que se podría dilucidar mejor la capacidad de detectar pequeñas diferencias entre los tratamientos. Sin embargo, estos estudios más potentes aún no se han realizado, y es difícil hacer recomendaciones prácticas que se basen en datos tan limitados. Otra limitación de la investigación sobre el tratamiento de la resaca es la falta de estandarización de los resultados, lo que dificulta la comparación de los distintos estudios.
Posiblemente la mayor limitación de la investigación sobre el tratamiento de la resaca sea la falta de comprensión clara de la fisiología subyacente de la veisalgia. Los autores del estudio señalan que la resaca puede deberse a una serie de factores, como la producción de acetaldehído y congéneres, como el metanol, la deshidratación, la alteración del sueño y las perturbaciones de los sistemas inmunitario y endocrino. Dilucidar la fisiología de la resaca debería ayudar a los investigadores a encontrar una cura eficaz, y los ensayos reproducibles y bien realizados podrían permitir a los médicos ayudar mejor a los pacientes con resaca.
Resumen