HBO lo ha vuelto a hacer. True Blood cambió a James, el novio de Jess, por el actor de Bunheads Nathan Parsons en enero y ahora es el momento de ajustar las expectativas para el estreno de la séptima temporada. Desgraciadamente, eso significa que tenemos que despedirnos del joven intérprete de Johnny Depp, Luke Grimes, y tan poco tiempo después de habernos adaptado por completo a que Juego de Tronos cambie un guapo actor por otro (nuevo Daario FTW). Así se nos complica la vida, HBO.
En caso de que seas como la mayoría de los fans de True Blood y hayas dejado de intentar seguir el ritmo de los nuevos personajes hace dos temporadas, aquí tienes un pequeño repaso para ti: James es el vampiro ridículamente sexy y casi alarmantemente tranquilo que Jess conoció en la espeluznante prisión de vampiros de Anna Camp. En un momento dado, los asquerosos que dirigen esa institución insistieron en que James y Jess tuvieran sexo delante de ellos, ya sabes, para «investigar». James, siendo la persona increíblemente generosa que aparentemente es, se niega a tener sexo con Jess «porque es una buena persona». Más tarde, Jess admite que ha matado a un grupo de jóvenes hadas y, de alguna manera, esto estalla en un encuentro sexual que une a estos dos en un cortejo temporal. En resumen, James es el nuevo novio de Jess.
Al menos True Blood ha tenido la decencia de cambiar al actor original de James por alguien que se parece ligeramente, a diferencia de su predecesora de la primavera de HBO, que cambió a un aspirante a Fabio de pelo rubio y ojos azules por el alto, moreno y con barba Michiel Huisman como si nadie fuera a notar el asombroso cambio, aunque beneficioso. Aun así, el cambio es ligeramente chocante cuando se ve el corte final del estreno del domingo.
Aún así, al entrar en la última temporada de True Blood, no os alarméis cuando veáis a este joven caballero:
Prometemos que no es otro personaje nuevo (aunque no prometemos nada sobre otros rostros desconocidos en esta serie tan feliz por el casting). Sólo es el objeto del lujurioso afecto de Baby Vamp Jess.
Imagen: HBO; Getty Images